"Autor: Diego Fullaondo; se publican a continuación algunas consideraciones y objetivos de la unidad relativos a las capacitaciones y respuestas que se exigirán a los alumnos de cada uno de los niveles de proyectos"
1. Unidades y Niveles
La implantación de las Unidades de Proyectos para el curso 2010-2011, obliga a revisar y clarificar la tradicional estructura de Niveles de Proyectos.
Para ello es preciso comenzar precisando varias cuestiones:
- Unidades y niveles no son lo mismo.
- Las Unidades son verticales; es decir estarán dirigidas por un único equipo de profesores pero sus alumnos pertenecerán a niveles diferentes.
- Los Niveles continúan lógicamente siendo horizontales; es decir: cada alumno deberá ir superando sucesivamente todos los niveles de la carrera, desde el 0 hasta el 7, para alcanzar su titulación.
- Es previsible que la presencia de alumnos de diferentes Niveles en una misma Unidad, produzca efectos muy positivos en la respuesta del alumnado (en particular en los de cursos inferiores), ya que, desde el primer momento de la carrera, convivirán directamente con las propuestas de alumnos de Niveles superiores. Tampoco es desdeñable el efecto “frescura e ingenuidad” que producirá la sangre joven en los alumnos de cursos superiores, tentados siempre del exceso de “profesionalización” que acompaña estos Niveles.
- Pero esta positiva mezcla del alumnado, obliga también y más que nunca, a una rigurosa clarificación de las competencias que el equipo UNICO DE PROFESORES responsable de una Unidad, debe exigir al DIVERSO GRUPO DE ALUMNOS, que cursa diferentes Niveles. La enorme y acertada oportunidad de suponen las Unidades EXIGE la sistematización de los objetivos de cada Nivel. De otro modo, en lugar de producir el espacio de diversidad y libertad que se pretende que cada equipo de profesores pueda desarrollar en su Unidad, con su propia temática, metodología docente y estructura interna, solo añadiríamos una capa más de confusión entre alumnado y profesorado.
Las Unidades son una APUESTA, parcial y lógicamente arriesgada, de cada profesor, consensuada con el claustro del área y aprobada por el conjunto de la dirección de la escuela.
Su contenido específico parte de convicciones ideológicas, de intimidades profesionales, de oportunidades de mercado detectadas, de estrategias de marketing, de voluntades investigadoras, de… Casi cualquier enfoque tiene cabida en las Unidades. No son eternas. Es previsible que se vayan modificando a lo largo de los años para adaptarse a las nuevas sensibilidades, a nuevas preocupaciones, al nuevo profesorado, etc… Parece deseable una intensa diversidad. Pero siempre será el propio alumno el que la seleccione en función de la oferta que seamos capaces de presentar.
Pero estas apuestas necesarias que son las Unidades se enmarcan dentro de un proyecto docente global que confiere el rigor y de sentido global al conjunto del área. Esta estructura soporte son los Niveles de proyectos. Las premisas que deben cumplir son las siguientes:
- Estructura vinculada al TODO: Garantía de que cada alumno haya establecido contacto en algún momento de su trayectoria con los diferentes contextos relevantes para el proyectar del arquitecto. Al contrario que las Unidades que pueden y deben ser expresamente parciales en su planteamiento y desarrollo, el conjunto de los Niveles debe contemplar como objetivo fundamental la globalidad.
- Estructura ABIERTA: Una relación de mínimos, capaz de alojar en su interior todos los enfoques de las distintas Unidades, que serán las que asuman el protagonismo del proyecto docente.
- Estructura CLARA y TRANSPARENTE: Dirigida a sistematizar y objetivar la libertad total de cada Unidad, evitando confusiones e indeterminaciones tanto entre el alumnado como entre el profesorado.
- Estructura de FUTURO: Enfocada hacia lo que se vislumbra en el futuro como la actividad específica del arquitecto que proyecta. Para ello será necesario renunciar expresamente a muchos aspectos de la actividad profesional actual, que muestran claros síntomas de agotamiento, para concentrar los esfuerzos en nuestro valor diferencial.
2. Competencias específicas de los niveles 0 a 7
El arquitecto cuando proyecta propone una relación biyectiva entre dos elementos: unos determinados contextos que ha considerado relevantes y unas especulaciones formales que ha sido capaz de inventar. El proceso especulativo, inventivo o creativo (no se trata en este momento de abrir un debate semántico sobre esta cuestión), en cualquiera de sus acepciones o intensidades, es la piedra angular de nuestra profesión. Es nuestro valor diferencial y nuestra atribución específica y exclusiva.
Por lo tanto el entrenamiento y desarrollo de esa capacidad de INVENCIÓN, no es que deba ser la competencia o el objetivo de un determinado Nivel de proyectos o de una asignatura determinada: debe ser la competencia primera y fundamental de TODA la carrera. Y por supuesto de TODOS los Niveles de proyectos.
Pero por ese mismo motivo es muy difícil establecer una gradación de la intensidad del proceso inventivo. Se establecen por lo tantop, otros criterios que particularicen el entrenamiento que debe llevar a cabo el alumno durante su periodo formativo en esta, especialidad única del arquitecto frente a otras disciplinas.
La resistencia y opacidad a la sistematización que ofrece el proceso creativo aislado, no se produce en el otro término que se señalaba de la relación biyectiva que construye el proyecto: los contextos relevantes. Estos sí son analizables, cuantificables y objetivables con facilidad. La respuesta de cada arquitecto ya formado, e incluso de cada proyecto, se concentra con mayor o menor intensidad en todos, varios o uno de ellos. Pero ese proceso de selección de contextos pertinentes para un proyecto determinado, solo es posible realizarla una vez que se ha atravesado, experimentado y practicado la producción de la respuesta inventiva dentro del ámbito de cada uno de ellos.
De modo que es más operativo establecer las competencias específicas de cada Nivel de proyectos, en función de la atención prioritaria del proceso inventivo y creativo fundamental, a unos determinados contextos exclusivos en cada uno Nivel.
Desde esta óptica se propone a continuación el ámbito específico de trabajo y valoración del trabajo del alumnado en cada uno de los Niveles de proyectos:
Nivel 0
- El objeto de este primer nivel es provocar el choque entre los procesos especulativos plásticos y la implantación de la actividad que siempre conlleva la arquitectura: El establecimiento de la relación biyectiva entre forma y actividad. La comprensión de la forma como la herramienta específica del arquitecto para la organización de la actividad del ser humano.
- Ejercicios de diversas escalas y características, preferiblemente muy alejados de las convenciones y los programas disciplinares. Éstos últimos suelen estar sólidamente anclados en las jóvenes memorias de los alumnos y no producen otro efecto que el de reducir drásticamente las posibilidades de la especulación, convirtiendo precipitadamente soluciones obvias y reconocibles, en verdades únicas e universales.
- La valoración del trabajo de los alumnos se realizará en función de la intensidad con que esos procesos especulativos plásticos hayan construido una respuesta apropiada a una dificultad programática planteada.
Una vez asimilado este mecanismo fundamental y básico en el primer Nivel de proyectos de la carrera, el cuerpo central del área, los Niveles 1 a 6 establecen un recorrido sucesivo por los diferentes contextos que el arquitecto puede contemplar en su proyecto. Se han agrupado por parejas, entendiendo que en el primer Nivel de cada dupla, el alumno adquiere el dominio y conocimiento suficiente del contexto en cuestión para incorporar en su respuesta creativa soluciones conocidas del mismo, mientras que en el segundo se le exigirá la manipulación especulativa y personal del contenido intrínseco del contexto tratado.
Niveles 1 y 2
Contexto de CAPACIDADES NATURALES
1. Contexto entendido como: ENTORNO PERCEPTIBLE, capaz de desencadenar por sus singularidades la respuesta del arquitecto.
2. Protagonista del proceso especulativo: el hombre como entidad INDIVIDUAL, capaz de percibir un entorno de escalas y características diversas, y actuar sobre él con decisión, para apropiárselo mediante su manipulación.
3. Pregunta: ¿QUÉ?
4. Área de conocimiento asociada: ESTÉTICA.
5. Relaciones disciplinares: HISTORIA y COMPOSICIÓN.
6. Relaciones trans-disciplinares: ARTE, SEMIÓTICA, PSICOLOGÍA y ERGONOMÍA.
7. Concepto central: TIEMPO y ARQUITECTURA (tiempo como historia; tiempo como parámetro manipulable; tiempo como duración vital)
8. Desencadenantes contextuales sobre los que construir la propuesta: / el entorno físico / la medida / la escala / la proporción / la estructura organizativa / la luz / el sonido / la textura / el recorrido / la habitabilidad / la utilización / la interacción con el paisaje / la significación /
9. Comentario: La ampliación de la realidad producida alrededor del mundo DIGITAL, forma parte ya en el panorama contemporáneo, del entorno perceptible del ser humano, en muchos casos y de modo creciente, superando en relevancia y significación al entorno físico y las capacidades naturales de los cinco sentidos tradicionales (vista, oído, olfato, tacto y gusto).
Niveles 3 y 4
Contexto de SABER HACER PRÁCTICO
1. Contexto entendido como: VIABILIDAD TÉCNICA, que acota el abanico de respuestas posibles del arquitecto.
2. Protagonista del proceso especulativo: el hombre como MAQUINA PRODUCTIVA, que dispone los diversos medios técnicos para ejecutar la manipulación de su entorno material.
3. Pregunta: ¿CÓMO?
4. Área de conocimiento asociada: TÉCNICA.
5. Relaciones disciplinares: ESTRUCTURAS, INSTALACIONES y CONSTRUCCIÓN.
6. Relaciones trans-disciplinares: DISEÑO INDUSTRIAL, ECONOMIA, GESTION DE PROCESOS
7. Concepto central: MATERIALIDAD y ARQUITECTURA
8. Desencadenantes contextuales sobre los que construir la propuesta: / sustentabilidad / funcionamiento / normativa y convención / estanqueidad / jerarquía / rentabilidad / mecanismos y organismos / innovación / energía / residuo /
9. Comentario: La EFICACIA y la COHERENCIA de los procesos de proyecto en cada paso, son el eje central de estos niveles, en los que el compromiso con la resolución material de la acción del arquitecto crece. Pero ello no implica la adopción inevitable de un catálogo de las soluciones disponibles en el mercado, sino todo lo contario: el papel del arquitecto es empujar al mercado hacia la innovación y la definición de soluciones cada vez más idóneas
Niveles 5 y 6
Contexto de CREENCIAS SOCIALES
1. Contexto entendido como: HABITOS O CREEENCIAS COLECTIVAS, en las que se incrusta la respuesta del arquitecto, estableciendo fuertes relaciones de dependencia mutua.
2. Protagonista del proceso especulativo: el hombre como ser SOCIAL, cuya actividad está condicionada por conjunto de creencias colectivas que la organizan de un modo muy determinado.
3. Pregunta: ¿POR QUÉ?
4. Área de conocimiento asociada: ÉTICA.
5. Relaciones disciplinares: URBANISMO.
6. Relaciones trans-disciplinares: FILOSOFIA, POLITICA, SOCIOLOGÍA.
7. Concepto prioritario: PROGRAMA y ARQUITECTURA
8. Desencadenantes contextuales sobre los que construir la propuesta: / la actividad humana / lo urbano y lo rural / lo público y lo privado / la segregación y la mezcla / lo específico y lo genérico / el poder y el pudor / lo esencial y lo residual / lo individual y lo colectivo / lo real y lo virtual / la infraestructura /
9. Comentario: Este es el bloque de contextos más contemporáneos y, como tal, es objeto de innumerables propuestas, estudios y tomas de posición. Por este motivo es preciso recordar especialmente, que un proyecto de arquitectura no debe ser valorado prioritariamente, y menos en el ámbito universitario, por adoptar un contexto u otro como relevante; tampoco por una de toma de posición decidida y previa frente a un contexto determinado; sino que debe ser criticado por la mayor o menor eficacia con que la FORMA ARQUITECTONICA inventada, permite acercarse a unos objetivos planteados.
Una vez finalizado esta secuencia de atenciones preferenciales a unos contextos y otros, el alumno debe expresarse ya de acuerdo a sus propias convicciones y con su propio lenguaje arquitectónico. El nivel 7 de proyectos en primer lugar y el PFC en segundo, deben ser lo marcos en que se enfatice la construcción de la voz individual del nuevo arquitecto, una vez garantizada la visión global y el dominio de las convenciones universales, en los niveles previos del proyecto docente.
Nivel 7
- El primer paso lógico de este nivel es la necesidad de una SELECCIÓN personal por parte del alumno del contexto o los contextos prioritarios sobre a los que responderá con su proyecto. Previsiblemente en función de cada alumno e incluso de cada ejercicio, la atención se concentrará en unos u otros de los ensayados en los niveles anteriores.
- Pero, sin perjuicio de la parcialidad necesaria e individual de cada alumno, la respuesta inventiva será capaz de tomar posición y resolver en la medida que lo considere necesario la totalidad de las cuestiones que conciernen a la arquitectura. Será necesario por lo tanto en este nivel garantizar el MINIMO DE CONVENCION exigible para que la respuesta sea comunicable y operativa dentro del marco general disciplinar.
- Sin perder nunca de vista, en este nivel especialmente tentado de una profesionalización excesiva de la respuesta, que el hecho diferencial de la actividad del arquitecto (al menos considerando el área de proyectos) reside en su capacidad de INVENTAR.
